16 de diciembre de 2012

MAÑANA DE DOMINGO


Hoy me he levantado con los pensamientos y los pelos alborotados; tengo la cabeza como la olla a presión de la abuela. No sé si dedicarme al bricolaje culinario,a ordenar un armario, a mover los muebles de sitio, a atracar la nevera constantemente, a quitar pelusas de debajo de la cama...o a repetir una y otra vez "mierda, mierda"
Hoy la bruja que hay en mi, me posee, se me pone la verruga en la nariz, en el espejo veo mi cara llena de arrugas, los ojos emiten destellos... Necesito esconderme mientras dure esta transformación. No debo salir a la calle, no puedo comprar el pan porque voy a tener ganas de dar con la barra a alguien; no debo hablar para que no salgan por mi boca sapos y culebras; no quiero coger el teléfono, le voy a dejar sonar y sonar...creo que debo ausentarme de vivir hasta que me recupere...
Tengo que buscar un antídoto cuanto antes; necesitaría una tienda para poder comprar cuarto y mitad de sexo, que combinaría con mis besos de mariposa. Siempre fue parte de mis somníferos preferidos; acudo a muchos bazares en busca del elixir; tienen tantas contraindicaciones que después de una toma, directamente me tengo que deshacer del bote...
Como siempre he de recurrir a mis "tontunadas escritas" para recuperarme; son como el ibuprofeno, me valen para todo...consiguen arrancarme el dolor del alma y lo escupen a una hoja de papel...
Me empiezo a sentir mejor, creo que voy a salir a comprar el periódico

   

“SABES QUE TE QUIERO MUCHO”


He recibido un guasapo "sabes que te quiero mucho"; esto no se dice y menos a estas horas…
Ya se han ido mis hijas a la cama, la pantalla de la tele en negro, el salón a oscuras, un tendal por medio y la única compañía con la que me he quedado son estas luces intermitentes a ritmo frenético del viejo árbol de navidad que año tras año vuelve a escena...

Ha sido un sábado intenso, en la mañana de ordeno casa, vete al supermercado, pongo lavadora, se coló la mala noticia...a mi ex le había dado un "jamacuco"; sin saber muy bien dónde me correspondía ubicarme, intenté ser útil, discreta y poco molesta; no era la protagonista de esta película...
Si que es cierto que de repente pasaron por mi cabeza todo un batiburrillo de momentos vividos y que los buenos se abrían paso entre el resto; hace tiempo que he comprendido que su marcha propicio mi regreso al mundo con el que soñaba...aquello que te contaba cuando nos conocimos, de ser un pájaro con la jaula abierta, aquello que nunca entendiste que no quería mas ataduras que los propios sentimientos, aquello que te hacía reír “tú lo que necesitas es una peluquera y no a mí”…

Los últimos meses hemos aprendido más el uno del otro que en los 15 años que hemos convivido juntos; Lo que en su día fue un drama, tu partida, hoy se me antoja como el volver de nuevo a esto que llaman vivir y enterrar a lo que me había acostumbrado que era una supervivencia en condiciones favorables, pero, a fin de cuentas una supervivencia…
Ahora me gusta que vengas, me gusta escucharte reír cuando te cuento que con cinco caballeros soy incapaz de hacer uno completo, me gusta ver como haces la tortilla de patata, me gusta como compartes confidencias con tus chicas, me gusta tu buen humor (le habías perdido hace tiempo) me gusta estas limpiezas que me haces de casa, y por supuesto también me gusta que te vayas.
Vas a salir de esta porque aún nos tenemos que dar mucha guerra, tendremos que seguir discutiendo, me tendrás que recordar por enésima vez que no quieres que Roberto tenga llave de la casa del pueblo…y una vez más, te mandaré a la mierda. Y ojalá tengamos muchos años para discutir…

Voy a contestar a tu guasapo: “yo también a ti”