16 de diciembre de 2012

MAÑANA DE DOMINGO


Hoy me he levantado con los pensamientos y los pelos alborotados; tengo la cabeza como la olla a presión de la abuela. No sé si dedicarme al bricolaje culinario,a ordenar un armario, a mover los muebles de sitio, a atracar la nevera constantemente, a quitar pelusas de debajo de la cama...o a repetir una y otra vez "mierda, mierda"
Hoy la bruja que hay en mi, me posee, se me pone la verruga en la nariz, en el espejo veo mi cara llena de arrugas, los ojos emiten destellos... Necesito esconderme mientras dure esta transformación. No debo salir a la calle, no puedo comprar el pan porque voy a tener ganas de dar con la barra a alguien; no debo hablar para que no salgan por mi boca sapos y culebras; no quiero coger el teléfono, le voy a dejar sonar y sonar...creo que debo ausentarme de vivir hasta que me recupere...
Tengo que buscar un antídoto cuanto antes; necesitaría una tienda para poder comprar cuarto y mitad de sexo, que combinaría con mis besos de mariposa. Siempre fue parte de mis somníferos preferidos; acudo a muchos bazares en busca del elixir; tienen tantas contraindicaciones que después de una toma, directamente me tengo que deshacer del bote...
Como siempre he de recurrir a mis "tontunadas escritas" para recuperarme; son como el ibuprofeno, me valen para todo...consiguen arrancarme el dolor del alma y lo escupen a una hoja de papel...
Me empiezo a sentir mejor, creo que voy a salir a comprar el periódico

   

“SABES QUE TE QUIERO MUCHO”


He recibido un guasapo "sabes que te quiero mucho"; esto no se dice y menos a estas horas…
Ya se han ido mis hijas a la cama, la pantalla de la tele en negro, el salón a oscuras, un tendal por medio y la única compañía con la que me he quedado son estas luces intermitentes a ritmo frenético del viejo árbol de navidad que año tras año vuelve a escena...

Ha sido un sábado intenso, en la mañana de ordeno casa, vete al supermercado, pongo lavadora, se coló la mala noticia...a mi ex le había dado un "jamacuco"; sin saber muy bien dónde me correspondía ubicarme, intenté ser útil, discreta y poco molesta; no era la protagonista de esta película...
Si que es cierto que de repente pasaron por mi cabeza todo un batiburrillo de momentos vividos y que los buenos se abrían paso entre el resto; hace tiempo que he comprendido que su marcha propicio mi regreso al mundo con el que soñaba...aquello que te contaba cuando nos conocimos, de ser un pájaro con la jaula abierta, aquello que nunca entendiste que no quería mas ataduras que los propios sentimientos, aquello que te hacía reír “tú lo que necesitas es una peluquera y no a mí”…

Los últimos meses hemos aprendido más el uno del otro que en los 15 años que hemos convivido juntos; Lo que en su día fue un drama, tu partida, hoy se me antoja como el volver de nuevo a esto que llaman vivir y enterrar a lo que me había acostumbrado que era una supervivencia en condiciones favorables, pero, a fin de cuentas una supervivencia…
Ahora me gusta que vengas, me gusta escucharte reír cuando te cuento que con cinco caballeros soy incapaz de hacer uno completo, me gusta ver como haces la tortilla de patata, me gusta como compartes confidencias con tus chicas, me gusta tu buen humor (le habías perdido hace tiempo) me gusta estas limpiezas que me haces de casa, y por supuesto también me gusta que te vayas.
Vas a salir de esta porque aún nos tenemos que dar mucha guerra, tendremos que seguir discutiendo, me tendrás que recordar por enésima vez que no quieres que Roberto tenga llave de la casa del pueblo…y una vez más, te mandaré a la mierda. Y ojalá tengamos muchos años para discutir…

Voy a contestar a tu guasapo: “yo también a ti”

14 de noviembre de 2012

AL CHICO DE LAS ESTRELLAS




...Y el sol ha salido.

"Chico de las estrellas" hoy quiero que te sientas afortunado; para ello te voy a mandar un pequeño ejercicio; presta atención a las cosas bonitas, entrañables y sencillas, a los "buenos días" de un camarero, al olor del café del bar del pueblo, a la sonrisa de un niño cuando te atropella con la mochila, a la disculpa de la señora con el carrito de la compra....a mi mail...y vete guardándolas todas en la estantería del alma que pone "la belleza de lo minúsculo". Acuérdate que a veces estas "cosillas" como son tan diminutas, vienen camufladas y no todo el mundo las puede ver, pero un "chico de las estrellas" tiene ese privilegio; además andaré yo por ahí rondando y si veo que se pasas de largo alguna, te daré algún "escobazo"...
Este pequeño ejercicio garantiza llegar a final del día con la sensación de haber vivido "con calidad" y "calidez", el orgullo de ser el pirata que encontró un cofre lleno de monedas de oro diminutas, la satisfacción de haber hecho algo más que sobrevivir...
Y solo queda, antes de acostarse, enviar la frase del día a alguien que no encontró el tesoro: "me gusta que estés ahí" "eres un cielo" "te quiero" "me río con tus tontunadas", o simplemente "buenas noches"

Mi mail quiere inaugurar tu estantería.

26 de septiembre de 2012

DÍA DE LLUVIA

Por fin, un día gris. Esta mañana al despertarme y no sentir una claridad cegadora, he pensado que había llegado el momento de ponerse en marcha, aunque solo fuese para ensimismarme viendo llover desde la ventana.

Haber ganado tiempo a la mañana me llevó a un cambio de planes. Devolvería a la alacena las albóndigas de bote y me pondría a hacer “manualidades” con una caja de obleas que llevaban desde antes del verano  rodando por el fogón. Manos a la obra para canalizar todo el exceso de energía que me había provocado la lluvia.  Ese hojaldre más seco que el “ojo la Ines”, esos huevos medio cocidos por las prisas, ese horno cuya utilidad consiste en guardar sartenes…iban a imponer un ritmo frenético a las primeras horas de la mañana. ¡¡Menudo lío!! ¿Quién me mandó meterme en una aventura culinaria a estas horas? Resultado, perdida de paciencia ante la incapacidad de pegar el hojaldre con el tenedor. No había manera de que aquel hojaldre pegase a golpe de tenedor. Como dios me dio a entender, coloque con no pocas dificultades aquellas “desastradas” empanadillas que se resistían a despegarse de mis manos y del papel vegetal. Una patina de huevo batido ¿con qué pincel? ¿el del tinte del pelo ó el de las acuarelas de mi hija?. Desayuno de tortilla francesa por no tirar las sobras… ¡con lo que me gusta las galletas con cola-cao!

¿Qué he hecho? El fregadero lleno de cacharros,  ahí se queda. No hay tiempo para dedicar un minuto mas a las manualidades, faltan las camas, la ducha, levantar a la peque, recoger la ropa que esta lloviendo, subir al trastero a por las katiuscas…Unas al horno y otra a la ducha. Sobre la marcha decidí lavarme el pelo, darme la crema corporal (nunca me la doy porque no tengo tiempo), hacer unos estiramientos en la alfombra…joder los efectos terapéuticos de la lluvia me han hecho olvidar que hoy es día de  prescindir del transporte público y que toca atasco. ¡Se me han olvidados las empanadillas! Mierda, se han achicharrado. No perder la calma, unas al cubo de la basura y toca rescatar el bote de las albóndigas.
 
Cuando me siento al volante, ha llegado uno de los mejores momentos del día. Soy feliz en el atasco; música y pequeñas tontunas radiofónicas hoy me han hecho sonreír; Rosa quería decir a Roberto que es un campeón y que estaba muy feliz con esa hora que le lleva al muchacho “el momento coyunda” (consulte la sección de sinónimos del wordreference). El chico estaba a punto de pedir cita en el urólogo, pero mira por donde su chica se había  encargado de gritar a los cuatro vientos las virtudes de su amante. Un grupo de buenos profesionales había hecho sacar lo mejor y más entrañable de la pareja.
 
Finalmente llego al destino; el garaje de los bajos de una parroquia. Me encuentro con la sonrisa y los buenos días de Pepe. Pepe es uno de los hombres más importantes de mi vida. Hace años pensaba que era preciso tener un amigo abogado, otro mecánico y un médico…

Con el paso de los años mis ángeles de la guarda son Toni, el manitas, Brenda, el fisio y Pepe el encargado de mirar por mi economía haciendo la vista gorda y no cobrando la estancia del coche. Soy una afortunada; muchas veces que no he tenido un buen día Pepe me hace sentir “grande, querida e importante”. Gracias. Cualquier día nos tocará esa primitiva…

Seguía lloviendo y el último paraguas había desaparecido del coche. Y con el bolso de sombrero cruce el par de semáforos, me llevé por delante a un par de viandantes, serpentee entre colegiales sin prisa y cuando llegue a la explanada del edificio de oficinas mire hacia el cielo y deje que los goterones me cayeran por la cara como una bendición divina.
 
Que llueva, que llueva….

20 de septiembre de 2012

CUANDO LA TRISTEZA SE APODERA DE MI

Cada cierto tiempo colapso; me vuelvo extremadamente sensible y frágil. Supongo que justificarlo por la biología femenina, es insuficiente; me gusta pensar que es el estadio anterior o una forma de coger carrerilla,  para volver de nuevo a ese lugar donde la vida se torna bulliciosa, entretenida, rabiosa, meticona…

Cuando esto  ocurre me paso el día imaginando que animal, ser ó cosa sería  ideal para adoptar y así camuflarme hasta que el sol brillase de nuevo. Un gato de angora lamiéndose las patas y restregándose por el fogón no sería una mala posibilidad; y más pensando que los de hoy retozan entre  cojines de plumón, son los reyes de la casa y tienen un lugar privilegiado al lado del plasma y pocos niños les tiran del  rabo. Le hacía mucha gracia a mi suegra cuando le sugería que si alguna vez me rencarnaba quería ser “fiera” (fifi) un gato callejero que le habían metido sus hijos y contaba con todos los beneplácitos de la dueña…
Me siento pequeña;  creo que lo mejor va a ser una hormiga, pasarme el día con los granitos de aquí para allá para no pensar en lo triste que estoy. No se si quiero ser hormiga por la pequeñez o por aquellos recuerdos de infancia que me sentaban  en el escalón de entrada de  la casa “grande” y me ensimismaban durante horas mirando las interminables reatas que diminutas hormigas formaban. Me gustaba interrumpir su desfile con un tallo de espiga o quitarlas su preciado botín…enseguida se recomponían y volvían a la carga. Toda una lección.

Quiero recordar que alguien me dijo un día que si algún animal le sugería,  era una gacela; me gustó la “comparata”; enseguida me reconocí en su libertad, en espacios inmensos abiertos, en un ir y venir inquieta, en sus cabriolas, en estar siempre bien acompañada, en estar expectante ante cualquier “sorpresa”…; pero hoy carezco de este virtuosismo; hoy prefiero ser algo mas insignificante, poco molesto porque no tengo nada que dar, algo que pase desapercibido como quiero que pase la propia pena…

Si fuera pájaro decidiría quedarme acurrucada en el nido, si fuera león iba a cazar “su padre”, si fuese caballo el primero que se subiese,  al suelo;  si fuese perro dejaría robar a los ladrones, si fuese gallina ni un huevo pondría, si fuese conejo no movería ni las orejas, si fuese vaca que hoy “no me tocasen las tetas” , si fuese tortuga, no saldría de mi caparazón, si fuese ternero estaría pegado al lado de mi mamá para no sentir el frío que produce la tristeza…creo que ni el reino animal hoy me deja un resquicio para esconderme;  recurrir a él, me ha arrancado una leve sonrisa.

Finalmente creo que una marmota es una buena elección. A dormir, mañana será otro día.

31 de agosto de 2012

MAÑANAS DE VERANO


Querida becaria; como te he prometido que escribiría en el blog, aquí me tienes. No tengo muchas ganas, pero lo voy a intentar; tú sabes que hay temporadas que me gusta más sentir y vivir que reflexionar o sencillamente comentar “pequeñeces” o “tontunadas”.
Este verano por algún motivo que ni yo misma sé y no es tangible, es especial; quizás el calor tórrido al que no estamos acostumbrados en las latitudes del norte, quizás la independencia que empiezo a disfrutar por lo mayores que se están haciendo las chicas, quizás el estar inmersa en mis proyectos “rurales”…pero creo que sobre todo la elección que hice durante los kilómetros que me llevaron al lugar de destino, “disfrutar y ser feliz”. Recuerdo que días antes cuando buscábamos una frase para el twiter a ti te gustaba mucho aquella de “la felicidad es una elección” y aunque tengo poca afición a la “la frase sabia” que pulula por las redes, en esta ocasión me apunté a ella.
El día comienza temprano; soy incapaz de desprenderme de ese horario biológico que me impone la vida en Madrid; me gusta abrir las ventanas y la puerta para que la niebla de la mañana refresque la casa. Lleno el cubo blanco de agua y riego aquellos dos robles que hace un par de años, con mucha ilusión, planté a la orilla del río; uno de ellos tiene todas las hojas secas porque una vaca se rascó en su delgado tronco y no sé si sobrevivirá; mira que muchos días le hablo y ni por esas…; con mi cubo de agua al lado, me siento en la “penilla” y  miro ensimismada al Ebro; cada día la imaginación me lleva por distintos derroteros (otro día te lo cuento). Cuando considero que mi madre ya se ha levantado me voy a desayunar con ella; ese momento de atravesar mi huerta con chanclas y sentir como el rocío de la mañana me moja los pies, “no tiene precio”. Desayunos de toda la vida, leche con cola-cao y galletas, llenos de risas, cotilleos de la noche anterior, y las noticias “frescas” del periódico que hojeamos, demoran este momento entrañable; con el “subidón de madre” (a mis años aún lo necesito) ya estoy preparada para lo que me echen.
Tengo sueño me voy a la cama; hoy lo dejo aquí, pero prometo seguir...
Por cierto, la oficina es un coñazo sin ti, mi querida becaria…ya nadie me regaña…gua, gua; te echo de menos

13 de julio de 2012

CRISIS Y MÁS CRISIS

Con el verano llegó "la seca"; reconozco que no tengo ninguna gana de "bloguear". Es tiempo de tirarse a la calle; raro es el día que llego a casa antes de la una, después de tertulias interminables sobre crisis y amantes, digeridas a golpe de cerveza. Había prometido no hablar de la crisis, tengo una economía permanentemente en deficit y esta no me iba a suponer ninguna sorpresa en mi vida. Ante el bombardeo al que estoy sometida, veo que no soy inmune; anoche ya planteé medidas y di vueltas a la imaginación (sobre la marcha) para echar una mano a mis amigos. He de confesar que los retos me fascinan, me dan energía, me quitan penas y me enfrascan en mi imaginación; la tengo entrenada para perder el tiempo en mundos por explorar,  alejados de antiguas quimeras y fantasmas. 
Esta mañana recibía uno de los miles de mails donde una vez mas se hablaba de la crisis y sus consecuencias. Voy a pasaros la contestación que hice llegar a mi amigo que me llamaba a las "barricadas": 
Lo ratifico totalmente pero mientras espero que el colectivo reaccione, me paso la vida, manos a la obra, "luciendo" mi pequeño universo; así me "luce" a mí.

Los grandes cambios se producen desde lo pequeño hasta lo enorme, desde lo profundo a la superficie, desde el convencimiento, desde el interior, desde la reflexión....cuando era una jovenzuela me decían sonriendo "cuando te hagas mayor, te habrás olvidado...". Y lo cierto es que me siento muy feliz porque sigo siendo maleducada, con carácter, que da puñetazos en la mesa, que cree que todo se debe de decir con respeto y lo dice, que sabe que todos somos iguales independientemente donde nos haya puesto la vida, que impone y cada día se propone hacer del mundo un lugar donde riamos, amemos, disfrutemos, nos ayudemos, hablemos...

Hoy después de leer lo que me has mandado, y con los pinceles de todas las mañanas desplegados en la mesa, no quiero dar retazos con rabia (que es lo que me pide el cuerpo), es viernes y creo que es necesario que "los payasos" como yo, sigan saliendo al escenario para hacer sonreir y sacar algún que otro conejo de la chistera...

4 de julio de 2012

LAS BRUJAS TAMBIEN LLORAN


¡Vaya comienzo de semanita!  En teoría vaticinaba una semana ajetreada pero sin niñas; es la única semana del año que no están a mi vera.  Viaje el martes, viaje el jueves de punta a punta de España y  viaje de bautizo el finde semana.  A priori mucho viaje de trabajo…presentía que “mi semana” se iba a esfumar…como tantas veces.
De repente las cosas cambiaron…y me encontré de sopetón con mi tiempo;  no sabía que hacer, estoy acostumbrada a tener planificado hasta el día del juicio final…
Mientras pensaba,  tuve la necesidad de saber como lo estaban pasando mis hijas en la playa. Estaban en casa, aburridas, cabreadas, viendo la tele porque  su padre había ido a recoger al tren a la persona que ahora “le entiende”. Estoy cansada de escuchar eso de “no hay quien te  entienda” porque a mi me pasa lo mismo con el género masculino. Empiezo por no entender que en 6 escasos días de un completo de 365,  no puedas prescindir de “la que te entiende”… Y mantuve el tipo y les repetí una y otra vez que disfrutasen…No iba a arruinar el día a nadie, Valencia estaba lejos y no tenía varita mágica con tanto poder para darles una solución…Es lo que tiene ser una bruja de mierda
Cuando colgué,  en mi interior,  estallaron truenos y relámpagos;  comenzó el periplo de la búsqueda de la coherencia. Mis compañeras de trabajo me miraban y callaban; estaba claro que la opinión de una mujer lo único que iba a provocarme es mas irritación. En ese mismo momento pensé que lo más conveniente era  hablar con el género masculino;  necesitaba tener en frente a alguien de esta especie que me hiciese  verlo desde “el otro lado de la cama”
Pedí auxilio a la persona que hace  no mucho tiempo me amueblaba el corazón; necesitaba invitarle a comer, emborracharme, reír,  escuchar alguna palabra dulce…ni yo misma se muy bien que necesitaba. Pero de repente, ante mi grito de SOS, nadie respondía a mis llamadas y a mi rescate. Supongo que presuponer a alguien fuerte, con carácter conlleva a una postura cómoda por parte del socorrista; no hay que olvidar que todos somos débiles, fuertes, capaces, incapaces, dependiendo de las circunstancias. Si en un primer momento me llené de rabia, ahora llego la decepción, la tristeza, la soledad…al comprobar que el arca donde uno guardaba sus pequeños tesoros estaba vacía.
Y tiré de mis remedios caseros sencillos; monólogos ingeniosos de youtube, frases filosóficas que odio, pero que para momentos de turbulencias vitales vienen como anillo al dedo esos pensamientos tan trascendentales; no leí mas de un par de páginas de “La seducción del gintonic”...Era incapaz de poner freno a esa espiral y a ese desasosiego que se había apoderado de mi alma.  Finalmente pegué portazo y tome la sabía decisión de “Forrest gump”, tirarme a la calle; andar y andar…
Después de hora y media sin brújula la bruja llegó de nuevo a casa. Llamé a mi hermana, estaba dormida en el sofá; ella es mi sicóloga particular, nuestras soluciones pasan por hacer unas buenas risas. No iba a ser fácil encontrar a alguien que me sujetase o me diese una bofetada para recuperar el norte y estaba claro que los conjuros no estaban haciendo efecto
Encendí la tele, “Indochina” a punto de concluir; esa madre (Catherine Deneuve)  preguntaba a su hijo adoptado vietnamita  que si había conocido a su madre biológica en la recepción.  El muchacho le comentaba con tristeza que estuvo allí esperando que alguien dijera su nombre…y le propinara un beso. Decidió irse.
 A mi me había pasado todo el día lo mismo, solo necesitaba una “palabra”, creo que a esas horas de la noche, pensé que me había valido cualquiera dicha desde el corazón. No siempre las cosas suceden como uno quiere - pensé.
Entre sollozos por la película y con mi “dolor del alma”  decidí irme a la cama y que el mundo de los mortales me dejara cuanto antes. Caí rendida cómo un bebe, había sido duro el trajín vital al que había estado sometida.
He despertado temprano, sonriendo, recordando un bonito sueño que había protagonizado alguien que horas antes me habían decepcionado. ¡Que sabiduría la naturaleza humana! Mi  imaginación me ha hecho vivir aquello que la vida no me dio; Gracias

1 de julio de 2012

SABADO POR LA NOCHE


Domingo por la mañana. Finalmente me tocó dormir sola.  

Una noche calurosa, un garito, chicos celebrando una despedida de solteros, chicas buscando príncipes azules, copas de toda clase…y muchas, muchas ganas de ligar por parte del personal. Cómo casi siempre, los dúos que se produjeron  no convencían a ambas partes…pero la atmosfera y el alcohol, se encargaron de dar el empujón final al destino improvisado.

Me tocó e “hice ojillos” a “caballero atractivo, camisa blanca a juego con dentadura, pantalón vaquero que le marcaba un buen paquete y aro reluciente en la mano izquierda”. La bruja los 5 primeros minutos se limita a sonreír y observar; aguanta estoicamente los primeros comentarios del interlocutor: “pareces una chica tímida”. ¿Tímida yo? Si en mis últimos encuentros solo me falta sacar la chuleta donde hay una declaración jurada de lo que espero y quiero del aprendiz de amante. Entre monosílabos y sonrisas fui neutralizando su verborrea inicial; cuando consideré que el caballero se estaba hartando y le conocía “un poquito”, tiré de ingenio y comenzó el juego. Solté las manos, hice carantoñas, me contonee a ritmo de la música…había llegado el momento de poner en marcha el plan de las tres S “sexi, sensual y sensible”. Este manual es tan antiguo como eficaz. Cuando el caballero estaba entregado consideré que había llegado el momento de hacer un guiño a una de mis amigas para ir al baño a cambiar impresiones, mejor dicho risas y repintarnos los labios…¡¡Uno de los mejores momentos de la noche!!
Pero la noche entró en otra fase, como casi siempre. No hubo sorpresas, creo que todos contamos lo mismo ¡que infelices somos! ¡que no nos comprenden las mujeres! ¡que el jefe nos putea! ¡que no llegamos a final de mes!...lo cierto es que cada frase lapidaria en este estado de embriaguez se va diluyendo entre risas y se ha convertido en parte del lenguaje de la seducción. Según la noche va trascurriendo algo pasa por mi cabeza. No me gustan las victimas, me quitan energía, ganas de vivir y me seducen muy poco a la hora de ir a la cama; Y poco a poco el caballero de la camisa blanca con la dentadura a juego me fue inquietando y me entraron unas ganas locas de correr…Había llegado el momento de coger un taxi

Menos mal que me tocó un taxista  que no me dirigió la palabra; estaba demasiado entretenido con la alineación de la selección española para el partido de la Final. Gracias a Dios.

Mientras dejaba los neones de la ciudad sonreía pensando en mi amiga Maite que acaba de poner una tienda “on line” de taper-sex.

18 de junio de 2012

TOCA HACER DE NUEVO LA MOCHILA

Ha llegado el momento de volver a hacer camino; ya tengo la mochila encima de la cama. Primero los trajes de altanería, carácter, prepotencia, orgullo…solo para contadas ocasiones. Directamente al fondo de la maleta para que no me tiente su uso...
Aquí llegan mis trajes preferidos… ¡me cuesta guardarlos!, soy una sentimental de mierda… Me gusta tenerlos desparramados por la habitación para que alguien se les enfunde; paseos por la piel, wasapos matutinos y vespertinos para alguien especial, cocktails de imaginación, borracheras de Cardhu, palabras y “palabros” en cientos de mail para materializar y apresar momentos y sentimientos inolvidables,….y todo ello teñido de humor y amor (conjugar los verbos  reír y querer es uno de mis juegos preferidos). Estos trapos de mi mercadillo personal…”me sientan tan bien”... Es una lástima que hayan encogido de los lavados o quizás tú hayas engordado…
No se me tienen que olvidar mis especias; irán a los bolsillos delanteros de la mochila. Sazono los momentos cotidianos con ellos. Desde que me levanto uso y abuso de ellas; las galletas María con Irene, los bollos a media mañana con mis compañeras de pupitre, mis paseos al atardecer con mi hermano, las eternas conversaciones telefónicas con mi madre, el consultorio sexológico con mi hermana,...Esta parte de complementos siempre me han sentado bien…
Ha llegado el momento de echar un vistazo al lugar antes de irme. No sé que dejar, ¿un olor?, ¿una sonrisa?, ¿algún palabro?…creo que no quiero dejar nada. Me pregunto que tiene de especial este u otro sitio…Quiero suponer que los lugares los hacemos las personas. Me gusta ver  lagos en el desierto y poner el sol en los días de nubarrones…
Creo que estoy lista, solo me gusta llevar lo imprescindible. No tengo la espalda para cargar.
¡Ah se me olvidaba!, no quiero dejar  los pinceles que utilicé para pintar el arco iris de aquellos días de invierno desde el sofá blanco de un ático.
Salgo a la calle. Respiro hondo. No miro hacia atrás (es una de esas enseñanzas de infancia).
Hace un día muy bonito para volver a caminar…


Extracto de Proverbios y cantares (XXIX)

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.   (Antonio Machado)



3 de junio de 2012

ES UN PROBLEMA...VIVIR

"Es un problema tener cerca de 50 años y pensar que todavía quedan 30 maravillosos años para disfrutar... Debería sumarme al pelotón de los que se apuntan a envejecer prematuramente. Nunca he entendido muy bien porque hacer las cosas con tanta antelación y sobrevivir a los años con desencanto, sin ilusión, con tristeza...La sociedad del bienestar ha traído las pre-jubilaciones y hasta el vivir se ha resentido....
Es un problema ser generoso con el único propósito de sentirse bien; es sinónimo de tonto y asusta al que recibe. ¡Qué putada!...  
Es un problema levantarte y tirarse en tobogán de buena mañana dejándose sorprender; hay que quejarse de cada paso diario que damos, del atasco, del jefe, del trabajo, del compañero... 
Es un problema enamorarse; el deseo, la atracción, el amor están en vías de extinción después de los cuarenta...¿quizás es que nos sobra?
Es un problema demandar sexo, ternura, cariño; nos hemos acostumbrado a vivir sin ellos y a atiborrarnos a pastillas contra la ansiedad, el estress, el insomnio...me niego, ¡con lo bien que se duerme después de un buen polvo!... 
Es un problema soñar; o te falta un tornillo o empiezas a demostrar una demencia senil prematura...
Es un problema reírse; el mundo piensa que te ríes de él. Ellos no saben que no son tan geniales, capaces de provocarme una amplia sonrisa...
Conclusión, es un problema vivir...se nos ha olvidado. Llevamos demasiado tiempo sobreviviendo y nos hemos acostumbrado a nuestras imprescindibles jaulas de oro...


22 de mayo de 2012

LAS BICICLETAS SON PARA EL VERANO


Lo último que he escuchado sobre practicas para alcanzar la felicidad consiste en recordar momentos divertidos del día antes de acostarse; me conformo con que me sirva solo para “sobrevivir con nota”. Ha sido un lunes que no deja ninguna huella en mi almanaque de sonrisas del alma. No se si voy a encontrar ese insignificante guiño que me hizo por un segundo sentirme bien. Allá vamos.

Necesito urgentemente poner en mi vida una bicicleta. Desde mi adolescencia que estuvo marcada por este medio de transporte, no he vuelto a reparar en este artilugio. Aquellos años todo giraba alrededor de mi bicicleta amarilla; los amores, las fugas, la destreza (una vez por ir sin manos me fui derecha a un zarzal), el juego, ver mundo (aunque fuera al pueblo de al lado). El mundo de las dos ruedas y del equilibrio trajo multitud de aventuras y desventuras a mi vida.
La tarde caía lentamente, quizás era una percepción mía; un amigo me ha contado que si haces cosas variadas, el tiempo se dilata. ¡¡¡Vaya día, no ha dejado momento para el respiro!!! Con el propósito de airear las desilusiones y reafirmar  los glúteos tome un camino de tierra…la naturaleza y un día que comienza a adormecer llevan a los viandantes a un estado relajado donde los saludos y las sonrisas son moneda de cambio. Un caballero en bicicleta hizo su aparición a la altura de unos chopos que acompañan al camino atravesado por un espontáneo manantial; es un lugar con fango que se sortea con cierta pericia. No sé si fue mi camiseta sudada que dejaba entrever mis pechos o sencillamente su falta de costumbre, el caballero aterrizó de morros en la poza…y de repente me sentí adolescente de risa contenida, imploré al más allá para que la tierra me tragase…

Y volvimos juntos, charlando, sonriendo… y gracias al caballero hoy he tenido mi dosis de humor; sigo sin aficionarme al paracetamol…prefiero remedios naturales  

14 de mayo de 2012

ADIOS A TU ROSA

Hoy he tirado tu rosa a la basura, no podía permitir que estuviese un día más perdiendo su belleza y recordándome lo efímero que son las cosas bonitas de la vida. Antes de arrojarla al cubo me he quedado con su esencia; ese momento medio "ñoño", medio mágico de aquella tarde de paraguas a la salida del trabajo, esas risas nerviosas de no haber regalado ni recibido flores hace años; la improvisación de un jarrón con la botella de agua olvidada en el coche, una discusión sobre botánica sobre que eran esos yerbajos que la acompañaban y aún la hacían parecer más bella...

Y después vino, aquel aterrizaje de "tu rosa blanca en la botella de plástico" en una casa llena de mujeres...la mía; donde nada pasa desapercibido y menos lo relativo al corazón. La adolescente reclamaba el rojo como símbolo de esa pasión que actualmente es la brújula de su vida, la pequeña no entendía porque solo una; eso era insuficiente para una madre como la suya. Y la mas adulta del clan, simplemente sonreía...

Además, un poquito antes de tapar el cubo, me contó que también se llevaba buenos momentos paseados por tu imaginación en aquella "boutique de rosas" eligiendo con ayuda de aquella amable dependiente cual me podía gustar más. Esto también me lo quedo.
Gracias.

24 de abril de 2012

¡¡QUE GRANDE ERES MAMÁ!!


Acabo de hablar por teléfono contigo y vas a ser tú, quién ponga fin al “interruptus” por el que esta atravesando mi blog. Aún hoy sigues enseñándome multitud de cosas útiles, sencillas, bonitas que dan un sentido muy especial al día a día.   
Me enseñas optimismo; si alguien ve el vaso medio lleno, esa eres tú; sabes hacer juego sin cartas. Recuerdo cuando la abuela te llamaba “doña facilitas” y no soportaba esa actitud tuya; nunca te has preocupado por lo que el resto del mundo “mata”. 
Me enseñas a ser “eternamente joven”; en esa juventud las arrugas son muescas de la vida para recordarnos que hemos vivido. Nunca te quejas de nada, odias hablar del colesterol y la tensión; hablar de “los años” te produce tiricia. Ese “espejo picado” del aseo es tu único confidente. 
Me enseñas “buen humor”; te las pintas para parodiar situaciones cotidianas y triviales con una factura similar a los hermanos Marx.
Me enseñas a ser enérgica; eres pura dinamita; aún hoy emprendes nuevas aventuras.  
Me enseñas sabiduría; tienes un pozo sin fondo. Eres sabia; siempre has sido sabia. Has sabido en cada momento que tocaba y has sido capaz de disfrutarlo; y sino esperar que llegasen tiempos mejores.
Me enseñas pasión; sigues disfrutando de tus amigos y amigas como siempre lo has hecho, con escasos convencionalismos, dejándote llevar por el corazón; ese corazón tan soleado e inquieto que tienes.
Me enseñas paz, sosiego, tranquilidad. A tu lado, aunque se pare el mundo, no importa; recuerdo una noche no muy lejana que me metí en tu cama porque me dolía el estómago. A la mañana siguiente nos despertamos cuando el sol nos molestó, no oímos ni el despertador…
Me enseñas generosidad; tienes un gran manantial de bondad. No solo en las cosas materiales, sobre todo me das tu tiempo, tu alegría, tu ingenio, tu ternura…
Me enseñas, literatura, poesía…; nadie como tú para recitar o relatar tus pequeñas vivencias que son grandes por cómo las vives…

¿Sabes mamá? Aun sigo aprendiendo mucho de ti

29 de marzo de 2012

UN GARABATO

Voy a pintar un garabato en esta mañana de huelga.
En el garabato hay un sol grande con rayos largos, un árbol con el tronco ancho, montañas detrás de una pequeña casa que siempre dibujo con ventanas y un balcón con flores; aún queda nieve en los picos. He puesto un pequeño riachuelo por si los moradores de la casa quieren darse un chapuzón. La chimenea tiene humo; siempre ponía una nube de humo en las casas de mi niñez, quizás por eso hoy tengo chimenea francesa...
Ahora toca darle vida al garabato; ¿Nos bañamos desnudos en el riachuelo? ¿Hacemos el amor enfrente de la chimenea? ¿Escalamos la montaña de la mano? ¿Nos tiramos unas bolas de nieve? ¿Subimos al árbol para tocar las estrellas?...¡¡¡¡QUE SENCILLO ES SOÑAR!!!!
Otro día os contaré una de las muchas historias que se viven en mi infantil garabato

28 de marzo de 2012

ME GUSTA

En el último aquelarre hubo más que palabras. Reunidas en torno a la hoguera de los tristes hábitos invernales, propuse para el nuevo periodo que se avecinaba, reivindicar una postura más pasional y menos filosófica; cambio la pluma por la escoba, vivir por escribir. Después de un intenso debate y a petición de una becaria insolente accedí a continuar en este nuevo negociado en que me había metido; pero como casi siempre desde mi testarudez, inconstancia y capricho.  


Voy a espantar esta astenia primaveral recordando las cosas que me gustan…


1)   Me gusta la gente que siempre tiene una sonrisa en la cara. Es la mejor manera de “encarar” cada día. Creo que fue Groucho Marx quien decía que “la risa es el camino que mas corto entre dos personas”. Y aquella otra: “No dejes de sonreír, alguien se puede enamorar de tu sonrisa”. Menos frases bonitas y a practicar


2)   Me gustan las personas que son capaces de mandar al carajo los “asuntos de estado” de sus vidas a favor de perder el tiempo en pequeñeces; ¿dónde esta lo importante de la vida? Punset cuenta que la clave se la dio un grafitti en el metro de Nueva York en los años 60, dónde se leía  “Is there alive before death?” (¿Hay vida antes de la muerte?)


3)   Me gustan aquellos que siempre ven “el vaso medio lleno” y mejor si es de vino…


4)   Me gustan los que viven cada momento con la intensidad suficiente de hacerlo único, irrepetible, para almacenar directamente en la parte soleada de la memoria, por si en algún momento es necesario tirar de archivo y recordar


5)   Me gustan aquellos que no ven a un méndigo parte del mobiliario urbano. Los que saludan a los nuevos moradores por la crisis y los desatinos del sistema del bienestar.  Hace no mucho Alvaro Pombo en una entrevista con Sanchez Dragó sobre su libro “El temblor del héroe” (Premio Nadal) reivindicaba que debemos “cuidarnos los unos de los otros”


6)   Me gustan los “siempre” enamorados; esas vidas llenas de sobresaltos, de cosquilleo en el estómago, de suspiros y sollozos…creo que ellos demuestran que vivir puede ser “un arte”


7)   Me gustan los que tienen el impulso del primer momento, cuando lo racional y convencional están ausentes; los que meten la pata, se equivocan y se vuelven a equivocar por dejarse llevar por el corazón y la intuición


8)   Me gustan aquellos que siempre están pensando en el próximo proyecto sin haber terminado el anterior; cuando el aburrimiento esta a punto de instalarse, tienen el coraje de poner rumbo a lo desconocido.


9)   Me gustan los imprevisibles, que son capaces de sorprender al resto del mundo; e incluso a ellos mismos.


10)  Me gustan a los que de esta crisis no les preocupa ni la deuda internacional, ni las medidas de austeridad, ni Merkel y Sarkozy,  porque se sienten afortunados con el simple hecho de nacer en el primer mundo y de tener amigos…como vosotros


21 de marzo de 2012

TRES ROSAS

Esta noche miro ensimismada una y otra vez a mi bola de cristal; hoy el agua esta especialmente turbia y no me deja ver con mucha claridad algún pretexto para llenar la hoja en blanco. Es lo que tiene “ser una bruja de mierda”. Mis compañeras de trabajo me han recordado que hace una semana que no escribo; pues me voy a meter con ellas…
En nuestro comedor improvisado para tiempos de crisis, sala de juntas de pasados gloriosos,  nos ha acompañado Esperanza. Una buena amiga que nos pone al día de los últimos cotilleos de directivos y famosotes de la competencia.  Según la comida avanza la temática varía; en el momento del tiramisú y cuando el grupo se va reduciendo llega la hora de los devaneos amorosos; las últimas conquistas y las primeras decepciones de las últimas conquistas  sobre la mesa lacada con restos de comida. Se corrió la voz que nuestra amiga, mujer de modales exquisitos, estaba saliendo con un caballero de su talla. ¿Y quién es él? ¿En que lugar se enamoró de ti?  Nos confesó que era viudo. Respiramos tranquilas, seguía intacta la regla de oro “los que aun estamos en el expositor, es porque tenemos alguna tara”.
No podíamos dejar que Esperanza se fuese de rositas sin desvelar algún defecto que trajera al mundo de los mortales al señor. Por fin, “No es detallista”; que mas queríamos oír. División de opiniones, aquellas para las que eso era un problema insalvable y aquellas que se lo achacaban al cromosoma masculino. Antes que defensoras y detractoras nos batiésemos en duelo, Esperanza nos contó la solución salomónica que habían adoptado, “ella se encargaría de decirle el detalle y él de conseguirlo”; no estaba mal, había avanzado respecto al “cómprate lo que quieras y luego te doy el dinero”…
La primera petición fueron tres rosas; el caballero apareció con una docena de maravillosos capullos rojos. ¡¡Cuánto “capullo” hay por el mundo!!- pensó. Ella solo quería tres rosas, porque tres rosas representaban los tres meses que llevaban juntos. Y dos mundos paralelos se activaron. Él portaba orgulloso aquel maravilloso manojo de rosas, ella pensaba lo que iban a manchar cuando se marchitasen y sobre todo “tres tenían un significado, doce eran simplemente una docena”.  Me solidaricé con el caballero, quizás porque cuando he regalado rosas ha sido un desastre. Decidí regalar 10 rosas que representaban el decálogo de los buenos amantes; era su cumpleaños y acababa de fallecer su madre; pensé que unas flores  podrían colarse entre tanta tristeza. Recibí una llamada diciendo “no vuelvas a regalarme flores”. No me sirvieron los miles de argumentos que hicieron que mi regalo fuera tan desacertado. Desde entonces me limito a mandar “flores google” que son más económicas…

13 de marzo de 2012

LOS PRIMEROS AMORES

Aún estoy conmocionada del pasado sábado. Mis ganas de seguir exprimiendo la eterna juventud me llevaron a un antro a escuchar una banda de rockeros puber, “Super nadie”. ¿Qué hace una mujer como yo en un lugar como este? Ni yo misma lo sabía. Me dejé llevar; primero por una amiga, después por la hija de mi amiga y finalmente por el “Navigator”. Desde que apareció en mi vida, me la ha cambiado. Junto con la cama es el mejor invento de todos los tiempos. Se merece “reflexión” aparte.
Mi sentido de la puntualidad estuvo a punto de arruinarme la noche. Menos mal que el buen tiempo rebajó el grado de “mala leche” de la “esperona”. Por fin apareció mi amiga acompañada; eso le libró de los sapos y culebras que iba a escupir por la boca. Entre los recién llegados, la simpatía y buen rollito de una mujer me llamó la atención. De sobra es sabido que las mujeres entre nosotras a primera vista y en el primer encuentro no somos lo que se dice “amables” con el mismo sexo, pero Maribel derrochaba tanto entusiasmo que no me pasó desapercibida. De repente, mientras esperábamos que el concierto empezara de una vez, se acercó a mí y me contó su secreto a voces: “Me he encontrado con mi primer amor después de 30 años”. Allí estaba un caballero discreto, sencillo, parco en palabras, con la cara surcada por el tiempo, sonriendo…Y ella, ajena a sus miradas, seguía hablando y hablando. Era importante que yo supiera que Antonio no se había casado, que le había esperado siempre y que aún según ella tenía que esperar aún más. Las cervezas me permitieron reírme y advertirle que cuando se es joven esperar es sencillo, hay tiempo; pero cuando se tiene conciencia de que el tiempo es limitado, hay que administrarlo con eficacia para que no queden sueños por cumplir.
Siempre siento curiosidad por saber dónde arrancan las historias de amor. Un bonito  inicio (cobijarse en una marquesina hasta que pare el aguacero, perder el pañuelo de seda al cruzar apresurado un paso de peatones…) garantiza momentos emotivos.
¡¡¡Vaya con los hados!!! A Maribel y Antonio les cruzó en un Mercadona; en un principio me molestó muchísimo este marco para un cuadro de Romeo y Julieta; pero poco a poco fui asumiendo que las grandes superficies son lugares donde pasamos muchas horas de nuestra vida. Hoy no soy capaz de convertirlo en literatura.
“Supernadie” finalmente empezó a entonar sus temas de desamor, de perdedores, de olvidos…y “sus canciones para secar las lágrimas”. Me erigí en ser la “guardiana” de la pareja; mientras les contemplaba y escuchaba la música por mi cabeza pasaron “mis primeros amores”; primer amor de verano, primer amor en Madrid, primer amor extra marital, primer amor cibernético…todos ellos tienen un lugar en mi corazón; me han enseñado y con ellos he practicado vivir con pasión, a ritmo de suspiro.
Pienso que aún me quedan tantos primeros amores…”el primer amor del Inserso, el primer amor del curso –ejercite la memoria, el primer amor de los que estemos en círculo con silla de ruedas…
Siempre amando. 

8 de marzo de 2012

LOS ABUELOS DE MIS AMIGAS

Dentro de las bonanzas que ha traído la crisis a mi vida, una reseñable es que vengo con mi tarterilla, cual “obrerote” de la construcción (con todo mi respeto y admiración al gremio), y esto me supone desde comer y probar todas las exquisiteces de mis compis, (buenas cocineras) hasta compartir una tertulia de sobremesa de lo mas divertida, producto de los lingotazos de tinto ingeridos y por supuesto de la complicidad femenina.
La selección natural ha llevado a reunir en esos momentos, que se podrían llamar de terapia, a 4 generaciones de mujeres, “la de 20 y las de 40 y la de 50 y”; faltan las de 30 pero es que a esa hora están organizando quien recoge a los niños del colegio y quien les lleva a la clase de “tai chi chuan”.
La de “20 y” hoy estaba conmocionada porque el último fin de semana que se reunió la familia en torno al abuelo recién viudo y recién cumplidos los 82, les espetó a la altura del postre para que no se prolongase la comida familiar “voy a quedar luego con mi novia”; el balance a tal revelación se saldó con un hijo de urgencias por problemas coronarios, a otro le faltaba el aire por problemas respiratorios y el padre de mi amiga con problemas de fé: “no daba crédito”. Una pregunta unánime “…y quien es ella”. Es un dato básico para valorar la situación. Perfil de la novia del abuelo “colombiana que cuidó los 6 últimos meses a la abuela fallecida de alzheimer, edad: 47 años, madre de tres hijos que viven allá…”. No necesitábamos más datos  para machacar a la benjamín, que defendía a ultranza lo listo que era el anciano. La última advertencia que le había hecho: “No se si podré darte algo en tu cumpleaños porque estamos en crisis”. ¡¡¡Vaya con la crisis, es útil para todo!!!
La de “50 y” con experiencia en su familia de amores tardíos por parte de los varones nos explicó como aquel abuelo de los años 60, militar, que temblaban los nietos ante su presencia, se enamoró de una monja y perdió el “oremus”. Cuando a su padre le ocurrió algo parecido, las mujeres de la familia cerraron filas y se encargaron de ahuyentar a la modista empeñada en volver a llevar al altar al viudo. Relataba un viaje a Sevilla donde las “hermanísimas” se encargaron de separar a la pareja de tortolitos, unas con la dama, otras con papá; pero juntos y revueltos “nunca”. Cuando la señora les mostraba orgullosas los regalos del patriarca, les daba “mal”. ¡Menudo viajecito!, ni el color especial, ni la maravilla que es Sevilla salvó aquella escapada.
Los amores tardíos no son comprendidos..., y ¿sabéis lo que piensan los que tienen la suerte de disfrutarlos? …Que se joda el mundo.

7 de marzo de 2012

PRIMER DIA DE PILATES

Ayer fue mi primer día de "pilates"; cualquier cosa que abordo en la vida, aunque para el resto de los mortales sea muy cotidiana, para la bruja siempre es especial.
Cuando salía de casa, mis hijas me miraron de arriba a abajo y exclamaron "mamá, ¡que pintas llevas!". Menos mal que una tiene la autoestima por las nubes... Ya sabemos que una malla en desuso de mi hija, el niki de publicidad de carterpiller, las zapatillas baratas de Decathlon que compré para aqueña salida otoñal al campo contigo...no era el kit mas adecuado para presentarme en la clase de Pilates, donde se suponen que van las mujeres maduras, modernas e independientes. Como casi siempre me puede este espíritu provocador; sentía cierto regustillo sabiendo que era diferente a mis compañeras, aunque solo fuese en apariencia. Me esperaba el fisio para presentarme al grupo. ¡Vaya grupo mas enano!; la instructora, un caballero y una mujer madura. Y con la bruja, la tercera en discordia. Antes de tumbarme en la esterilla avisé "soy torpe". Las miradas se detuvieron en mí. Proseguí..."además de desorientada e ir con el paso cambiado". Por si no le quedaba muy claro a la profe le expliqué que tenía serias dificultades de imitar los ejercicios, que algo me ocurría en la cabeza para discernir derecha o izquierda, y que además seguir a alguien desde la posición frontal producía chispazos en mi cerebro. Para ilustrarlo comentar que el día que utilicé las  planchas de pelo de mi hija y me puse frente al espejo, el resultado fue una oreja quemada y el pelo en lugar de liso, erizado de la mala leche que se me puso. Y con todos estos "handicaps" finalmente me tumbé en la esterilla. Las 21:00 hras, si era hora de dormirse en lugar de "apretar ombligo" y alinear cadera...El caballero de mi izquierda, era rígido como un lingote. Cuando le miraba me producía una risa maliciosa que para colmo no podía contener...Paralelo al mundo de las lumbares y de la pelvis trascurría mi mundo interior que alimentaba lo ridículo de la situación. Como era incapaz de detener la risa consideré que tenía que hacer chascarrillos para disfrazar y dar sentido a mis "risas". Superado este momento y cuando pude recuperar el control y centrarme en "apretar ombligo", la angustia me invadió. Este grado de interés y alta concentración al realizar los ejercicios hicieron que los gases intestinales se desplazaran poco a poco al lugar de salida. ¡¡Menudo agobio!! Solo me quedaba rezar y rezar, oprimir los glúteos y que aquello acabase cuanto antes.  Se me hizo eterna la clase; me quería ir a mi casa a tumbarme en mi sofá...
Sobreviví al primer día de pilates...soy una campeona.

6 de marzo de 2012

EL 185


Medio adormecida en el autobús y de vuelta a casa, sentí que alguien me requería. Enseguida me despejé: “Hola Pepe, ¿Cómo estas?”. Por su contestación y su expresión, comprendí de inmediato que tenía que ser cautelosa.
Pepe y María eran un matrimonio de jubilados que vivían en mi antiguo portal y siendo vecinos no cruzamos más allá de las frases referentes a los fenómenos atmosféricos; yo siempre tenía prisa e iba lo suficientemente agobiada para dejar con la palabra en la boca y atropellar a cualquiera.
Cualquier mañana en mi vida suele arrancar con el periplo en el transporte público. Me gusta esperar en la parada, a veces un frío gélido me traspasa otras un sol abrasador me derrite. Es empezar el día “echándole valor”.
Durante varias mañanas pude observar que mi antigua vecina compartía parada y trayecto; siempre nos saludábamos y como si de lección aprendida de antaño se tratase, las frases que cruzábamos seguían siendo las mismas. Me llamaba la atención que se bajase en La Paz.
Un día, supongo que cuando mi actitud le resultó lo suficientemente familiar al vernos con asiduidad, y ella necesitaba imperiosamente contar su drama, se sentó a mi lado y comenzó a hablar. Empezó con el pretexto de mis hijas; recordaba mis idas y venidas con una y con otra. Y así comenzó a hablar de sus nietos con cierta nostalgia…Y no sé, cómo, ni en que momento me espetó su enfermedad, leucemia crónica….¡¡Vaya putada!! Articulé pocas palabras, me limité a escuchar; en ese momento intenté dibujar el gesto y la cara de la comprensión, del ánimo, del optimismo…no sé si esto tiene alguna cara, pero creo que su alma vio mi esfuerzo y desde entonces nos convertimos en compañeras de asiento del 185. Me desveló que llevaba siete años luchando; que contra pronóstico, iba celebrando Navidad tras Navidad. Para ella esta era su fecha de referencia, quizás porque era cuando juntaba a sus hijos y nietos. Y compartimos viajes charlando de cualquier cosa que nos provocará el día, el momento, la política, el periódico...; las últimas veces María tenía cada vez menos ganas de contar las proezas de ganar pequeñas batallas a la enfermedad y poco a poco las fuerzas empezaron a abandonarle. Tenía que ir dos veces por semana a las trasfusiones y le gustaba hablar de todos aquellos con los que compartía horas muertas en las salas de hospital. Sus verdaderos amigos, desde hace años, eran enfermos en su misma situación y todos los que alrededor les infundían ánimo y cuidados. Alguna que otra vez le pregunté que porqué no la llevaba Pepe en coche para evitar la incomodidad del autobús. No estaba dispuesta a tener a todo el mundo en jaque por su mala fortuna.

Y hoy, como no podía ser de otra manera, le reproché a Pepe, aquella soledad y angustia que yo sentía cuando María bajaba las escaleras del autobús. Siempre iba sola, tan erguida como le permitía la enfermedad y me sonreía desde el asfalto. No he escuchado sus razones, que importan ya…
Pepe corroboró mi teoría; María tenía como meta llegar a Navidad. Con ilusión preparó regalos, encargó cenas y comidas, y disfrutó de los que ella más quería como si fuese la última vez…sabía que era la última vez.

El 185, con parada en el Hospital de la Paz, seguirá llevando y trayendo historias de esperanza y de desesperanza.  

5 de marzo de 2012

NO QUIERO IR AL COLE

Esta mañana he hecho todos los conjuros habidos y de por haber para que el mundo se parase y no tener que venir "al cole". Como soy una bruja de mierda no me han dado los resultados al 100 por cien, pero si he conseguido una especie de confabulación... En vistas de que no había remedio posible, pínteme el ojo y el morro, púseme el bolso al hombro y a la parada del autobús. Uno de los viajes más gratificantes el de este lunes primaveral. ¡Menudo atasco!, una hora de sueño reparador dándome el solete en la cara, la almohada de cristal es un poco dura, de nana el ruido del motor diesel y ese "me muevo, me paro" meciéndome.
Llegada a la ciudad a las 11 de la mañana. "Señora, hemos llegado", una jovencita me avisó. No me explico este síndrome de la marmota; dormí fenomenal anoche y sin embargo quiero más. Debe ser la astenia primaveral...va a ser el trasnoche del sábado; recuperarse y espabilar la resaca empieza a ser cuestión de días. Me da igual, lo seguiré haciendo.
Vamos a poner en el lunes un poco de brujería para hacerlo mas llevadero; Abracalabra, pata de cabra, quiero...que hoy no asome por el despacho el jefe "pa tocar los coyons", reírme con mi compañera de pupitre, comer bombones a media mañana, que me guiñe mi chico preferido de la oficina (siempre establezco una pequeña complicidad para el trabajo no me supere), un par de noticias agradables de mis compañeros de universo (mamá se ha vuelto a enamorar, Pablo ha encontrado trabajo...), dos “guasazos” cariñosos (Bon día, se feliz...), y varias sonrisas ("No dejes de sonreír porque alguien se puede enamorar de tu sonrisa")...Ya están las peticiones hechas, a por ellas...
Proponerse de buena mañana disfrutar, reírse, decir cosas agradables, ayudar, saborear pequeños placeres...garantiza que  hoy tengas un "gran día". 

29 de febrero de 2012

EL PRIMER CASSETTE Y SU DUEÑA

“El cassette cumple 50 años”. La noticia de que la “cinta” como yo la he llamado siempre, cumpla medio siglo, no es mas que un pretexto para traer hoy, aquí y ahora, recuerdos de infancia y adolescencia.

El primer cassete aparato que recuerdo, llegó a mi pueblo por el correo. Aquel día Pepe, nuestro cartero, traía en su 600 un enorme paquete. Recuerdo que la llegada de correspondencia alteraba la paz de mi pueblo y sobre todo a los más pequeños nos gustaba salir a su encuentro para llevar a casa “noticias” de los que estaban en la ciudad. En el asiento de “skai”, color café con leche (este color me lo enseñó mi abuela) esperaban con impaciencia, además, una docena de cartas para llegar a su destino. Ese día al asomarnos mi hermana y yo a la ventanilla del coche, no pudimos por menos que preguntar “para quién era aquello”. Pepe, viendo nuestra curiosidad de niñas, con cierto desaire nos desveló el destinatario “Dolores”. Nos miramos y decidimos correr detrás del 600 hasta el barrio de arriba, dónde vivía Lola. Lola, era nuestro referente de cualidades y virtudes de adolescente; tenía 17 años, era una chica moderna con pantalón de campana y blusa ceñida, que se atrevía a pasear con sus pretendientes de la mano y se besaba cuando le apetecía.  En nosotras producía una verdadera catarsis; nos dejaba todas sus colecciones de fotonovelas que escondíamos en el desván, nos explicaba cómo había que besarse, eso de meter la lengua, de hacer un torniquete… ¡pura ingeniería! Nos contaba muchos secretos de los chicos, de sus gustos, de sus placeres… ¡Menuda enciclopedia! Mi hermana y yo pasábamos horas y horas escuchando tanta sabiduría en las artes amatorias. Menos mal que tuvimos a Lola, porque en aquellos tiempos en los colegios no había asignatura que se atreviese a explicar de forma natural la reproducción y en las casas cualquiera profundizaba en la frase socorrida de “los niños vienen de París”. Gracias a la existencia de chicas modernas, pasionales, con grandes dosis de imaginación, desvergonzadas (sin vergüenza) y “ligeras de cascos” como se las llamaba, una generación de mujeres tuvimos, empezamos a oír hablar de sexo desde la inocencia y la diversión.
Me he ido por los “cerros de Ubeda”…

Y sudando, corrimos como gamos, para buscar a Lola y que se acercase a recoger aquel paquete, que Pepe no nos dejaba entregar porque tenía que firmar. Escoltando a Lola, mi hermana y yo con impaciencia presenciamos todo aquel ritual. ¡Que pesado me estaba pareciendo Pepe, aquel día!
Finalmente, mientras el 600 se alejaba, mi hermana se encargó de convencer a Lola para que lo abriera allí mismo; ellas eran “más amigas”, mi hermana era más mujer; yo era una niña esmirriada que lo único que hacía era abrir unos ojos grandes como platos. No solía hablar para no meter la pata y que me mandaran a casa. A mi hermana le venía bien llevarme de escopeta, porque en casa eso de ir con Lola, no era bien visto; teníamos que ir con las aburridas de  nuestra edad. Se me hizo eterno aquel desembalaje, no escuchaba nada, me ensimisme en el papel de estraza, casi no escuchaba la voz de Lola relatando la procedencia de aquello. Por fin apareció una especie de radio grande de color verde (hasta entonces siempre las radios que había visto eran tristes, negras o marrones) llamativo junto con una cinta enorme de un tal Camilo Sexto. Y repitió otra vez aquella historia emocionada de cómo un día escribió a un programa de radio donde pedían el titulo e interprete de una canción que pusieron. Contó que mandó un montón de cartas, pero lo último que pensó es que ella iba a ser la afortunada. Ella estaba emocionada porque había recibido una cinta de su ídolo; aquel chico de melena y ojos claros que sobaba, miraba y remiraba; a mi sinceramente no me decía nada. Yo estaba alucinada con aquel “aparatejo”, aquella cinta enorme y ¡como sonaba aquello! 

23 de febrero de 2012

NOS EXTINGUIREMOS LAS MUJERES

No me he olvidado de vosotros, últimamente no corren buenos tiempos para las brujas. Caí de la escoba hace unos días y me di tal “golpetazo” que tengo el cuerpo y el alma doloridos; y por supuesto, las dosis de humor bajo mínimos.
No podía renunciar, aunque en condiciones precarias, a haceros saber lo que dicen los científicos. En no sé “cuantitos” miles de millones o millones de trillones de años, nos extinguiremos las mujeres. El hombre se quedará solito en el planeta y será capaz de procrear. Había pensado “montar la Dios” antes de que se queden solos…

Estoy bastante convulsionada porque siempre he creído que en esto de la evolución, se imponía la especie mas dotada a sobrevivir; y digan lo que digan, por tradición, costumbre e historia las mujeres, en eso, tienen un master. Y si no, que se lo digan a mi madre y a mi abuela, que han tenido que pasar décadas para que pensemos que no eran unas chifladas.

Supongo que como el Neardental y el de Cromañón, uno u otro, no pudieron convivir eternamente; siempre he sentido mayor aprecio por el primero, quizás simplemente porque su desaparición misteriosa le ha permitido en mi imaginación alcanzar unos valores y un lugar privilegiado. Sin embargo, mi tata…tarabuelo Cromagnon me ha parecido más rudo, más agresivo, mas egoísta, mas limitado, menos poeta, menos sabio, menos humano y en definitiva el precursor de este mundo tan extraño, donde hay que estar un poco loco para entenderlo; Y loco de remate para hacer cosas “que merezcan de verdad la pena”. (Os propongo “Ensayo sobre la ceguera” de José Saramago)

Vamos a dejarnos de filosofar y vamos a terminar sonriendo. Imaginar un piso, de una familia normal. Esta nueva familia esta compuesta por el abuelo, el padre y dos nietos. El abuelo seguro que está porque alguien tendrá que cuidar de esos niños. Han dicho que se extinguían las mujeres, pero no han dicho que los niños nacían adultos. En lugar del programa de Ana Rosa, en la tele mientras se desayuna el partido del Leganés – Sabadell (lo más de lo más). Se echa la hora y se discute quien lleva a los niños al cole (porque se va a seguir discutiendo) ahora que el partido esta que arde.  El abuelo ha tenido que levantar la voz para que “quien les ha tenido que les cuide”. Todo el mundo a trabajar, incluido el abuelo que no se va a librar; incluso además de canceres e infartos, se podrá uno “morir con las botas puestas”. La hora de la comida no va a ser un problema; pastilla supervitamínica y a otra cosa.  Y por la tarde…como locos a llevar a los niños de actividad en actividad. Tienen que ser los mejores, porque con tanto robot, es más difícil tener un trabajo que ir a la luna.
Y ya por fin en las alcobas. Los niños juntos en una habitación, seguro que todavía hay problemas inmobiliarios. Al abuelo le hemos comprado una cama articulada con posibilidad de masajes; la hemos encontrado en tele-tienda (como no podía ser de otra manera); hay que cuidarle o trabaja o a ver que hacemos con él. Y el padre, ese señor robusto, joven y lleno de vitalidad ¿Qué puede hacer en esa cama de 2x2 en una noche de luna llena? Seguramente es un caballero con manos muy grandes, quizás con alguna estigma que faciliten su “intracopulación”; un cuello extensible un par de palmos para llegar a “eso que piden todos”…
Gran problema: “no sé que ponerle, para un momento así, en el plasma de la habitación”…¿Alguna sugerencia?

14 de febrero de 2012

ESCAPADA ROMÁNTICA

Hasta el moño (se puede cambiar la primera inicial) del bombardeo de cómo vas a sorprender a tu “amad@” en S. Valentín. ¿Y qué hacemos los “singles”?

De las propuestas he decidido quedarme con eso de “la escapada romántica”, aunque sea a Guadalajara. Y en ella estoy dedicando mis esfuerzos para encontrar compañía para “escaparme”.
Aprovechando la tarifa plana de telefonía, llevo los últimos 15 días amortizándola en horario nocturno. Empecé por mi amigo gay; la última vez que cenamos, no hace mucho, utilizó la servilleta de moquero, por el hipo que le daba recordar al último “mazas” de su vida. No hubo suerte, había encontrado sustituto. Bajé con mi perro a un encuentro de “caninos haciendo popó”; mi atractivo vecino del quinto me recordó que el lema de su actual vida es “no sin mi perro”; ¿Y mi amigo policía con ese empleo de “trabajo dos semanas, libro una”?. ¡Que casualidad!, de servicio. En vistas que los singles estaban ocupados, tiré de mis amigos del grupo “mi matrimonio esta muerto, no follo desde el siglo pasado, mi mujer no me entiende…”, sencillamente por si les apetecía poner una reunión de trabajo en París o Londres; algo breve y sin trascendencia. Debí suponer que para este colectivo “el día de los enamorados” era uno de los días de  culto. Intento fallido.
Quizás la solución sea ir con una amiga. Agenda de móvil y de nuevo a la carga. A Raquel le tocan los niños. Pepa reservó un viaje con su hija. Y Lola me dejó muerta cuando me contó que había vuelto con Jose. Paso de llamar a Chiqui, Rosa y Gelen para que me recuerden y me repitan una y otra vez lo felices que son y que han encontrado al “hombre de su vida”. ¡¡¡Mierda!!! Y yo soy incapaz de encontrar uno para ir y venir a Guadalajara. Desisto. Al carajo la “escapada romántica”, que seguro que con la ola de frío se iba a estrellar el avión.
Bienvenid@s al club de las personas que van a elegir el día y el mes de S. Valentín cuando quieran y que aún esperan que alguien les pueda regalar la luna en una noche clara.

2 de febrero de 2012

"LA RE-ADOLESCENCIA"

¡QUE BIEN! ¡QUE BIEN! Mañana es jueves. El año pasado tomé una medida por decreto, los jueves sería el día de la semana dedicado a dar rienda suelta a mi imaginación. Haría un paréntesis en la semana y en mi edad y de nuevo “cual mozuela de veinte años”.
Aquí esta la mozuela reinventando cada jueves porque la adolescencia me resulta tan lejana que se me escapa de las manos cual agua. Hay jueves que revivo aquellos estados de embriaguez ocasionados por haber bebido más de la cuenta; ¡qué matices tan interesantes tiene la vida cuando el alcohol te hace despojarte de lucidez y responsabilidades! Había olvidado ese momento “llorón y melancólico” cuando van desapareciendo los efectos; menos mal que como buena brujilla tengo mis brebajes. Algún que otro jueves me gusta “amanecer” por el puro placer de retarme a mi misma; todavía soy capaz de ir al trabajo en blanco; no preocuparse, no opero ni hago cirugías; tampoco os voy a contar el tiempo de recuperación y los paseos del sofá a la cama y la cantidad exacta de vasos de vasos de agua que tengo que ingerir. Otra de mis prácticas adolescentes consiste en acudir a citas a ciegas y os puedo asegurar que los caballeros cada día me sorprenden más. Llevaba muchos años de “crianza” (hijos y animales de compañía) y había olvidado el alma masculina… ¡tiene tela! Sin embargo me encanta esta nueva faceta de “Dora, exploradora”.
Sí, claro, son jueves de pasión, de lujuria, de ternura, de risas, de sorpresas, de sexo, de amantes….en definitiva, de adolescencia.


Este “decretazo” es una de las medidas mas acertadas contra la “crisis” 

31 de enero de 2012

AL MASAJISTA, LOS LUNES

Entre mis propósitos para enero estaba darme unos masajes cuya prioridad era remediar el dolor de “riñones” que dirían las abuelas. A la búsqueda salí; recordé un letrero que hacía meses había leído multitud de veces “Próxima apertura de clínica de fisioterapia”; empezaría por ahí. Me había enterado que una amiga también había abierto un centro con todo tipo de terapias para mujeres, donde por supuesto no podían faltar todo tipo de masajes; era cuestión de comparar de precios.
Cuando me acerqué a la cristalera de la clínica, percibí que aquellos cristales biselados estaban relucientes y se intuía que el negocio funcionaba. Llamé y un caballero “bien plantado” a la par que educado salió a mi encuentro y me puso al corriente de bonos, tratamientos, técnicas…y todo lo más moderno en fisioterapia, osteopatía y terapia miofascial.  Me sonaban “a chino” muchas cosas, pero esos ojos negros certeros me trasmitieron una sensación de bienestar y automáticamente decidí ponerme en sus manos. ¡Vaya manos!, si no eran capaces de desentumecerme las articulaciones habría que pensar en el quirófano.
Salí convencida que aquí estaba mi camilla; a mi amiga le diría que lo había pensado mejor y de momento iba a posponer los masajes o quizás prefería alguna sesión contra la celulitis o el vello facial…algo se me ocurriría. Además, puestos a buscar razones de peso, el muchacho acababa de instalarse por su cuenta y yo podía ser una buena embajadora y dar buena razón de sus destrezas. Dejando de un lado la comparativa de precios que requiere la crisis y convencida de haber optado por la mejor solución altruista, he empezado mis sesiones. He elegido los lunes. Una forma de poner un poco de color al día más “horribilis” de la semana.
Voy más contenta que unas castañuelas a ponerme en esas manos enormes y prodigiosas...os contaré.
He llegado a la conclusión que a mi edad hay dos tipos de mujeres, las que tienen que reparar el cuerpo y ponen un fisio y las que tienen que reparar el coco y ponen un sicólogo.  Y a fin de cuentas, unas y otras, lo único que ponemos en la vida es un amigo.

26 de enero de 2012

LOS MARTES, NUEVA ASISTENT@

Con la llegada de la crisis, la partida de la asistenta. ¡Vaya putada! Ha sido el ser humano más útil que he puesto en los últimos tiempos en mi vida. Rememorando, el marido fue bonito mientras duró, pero hacía años que se había convertido en mobiliario del salón; el nuevo portero, daba razón de las entradas y salidas de todo “quisqui”; la peluquera, tenía la habilidad de hacerme el corte y el peinado que se le antojaba y salía de allí cabreada y directa a la ducha; el dentista se había empeñado en ponerme los brackets de adolescentes;  el de Santa Lucia me convenció para poner a las hijas en la poliza…Y así, suma y sigue. Vamos que me han ido arruinando la vida, entre unos y otros. No es correcto; mejor dicho me “han tocado l@s narices/guevos”. Y cómo casi siempre me deshice de lo necesario e importante pero me quedé con los brackes, con las canas, con las pólizas…que todo ello no me importa una mierda.

Retomemos “en positivo”; la crisis también me ha traído multitud de cosas buenas; voy a pensarlas. Tengo menos gases porque me llevo la tartera 3 veces por semana; la ropa de hace dos temporadas me cae que ni pintada y me facilita no tener que pensar por las mañanas; pantalón vaquero con blusa blanca ó pantalón blanco con blusa vaquera; un alivio, he vuelto al uniforme, como cuando iba a las mercedarias. Es una maravilla simplificar la vida. Transporte público ¡que gozada! Volverte a tropezar con los caballeros, con las señoras antipáticas y sonreír, dar los “buenos días” a los conductores de autobús…Lejos quedaron “pegarse” con los uniformados de la hora, con los artilugios que te daban el “puto ticket”, buscar cambio debajo de la mesa, dejar una reunión empantanada para echar dinero a la maquinita…No tengo muchas ganas de escribir. Un pequeño ejercicio: que todo el mundo dedique unos minutos a pensar las ventajas de la crisis.

La gran ventaja que me ha traído es una nueva asistenta, más económica porque no tiene mucha experiencia. Los lunes por la noche viene el ex a jugar al parchís con mis hijas; no pensar tan mal que el pobre muchacho trabaja los fines de semana y si tiene alguno libre también trabaja…es un gran trabajador y además él ha decidido el régimen de visitas. Últimamente tengo un espíritu muy “zen”: “cada uno haga, lo que le haga feliz”.  Le dejamos el cheslón para que descanse “como Dios manda” porque al día siguiente tiene una jornada dura de trabajos domésticos. Desde que limpia ventanas se ha dado cuenta de lo grandes que son los cristales, desde que tiende ropa se ha dado cuenta que en una colada de mujeres hay mas bragas y sujetadores que pingüinos en el documental de ayer de la 2, que las pilas de ropa no caminan a los armarios, que el culo de la sartén no se limpia solo…etc. Es una asistenta con mucho por aprender….No vamos a ser exigentes no sea que se despida sin haber pasado el periodo de prueba.  Espero sortear la crisis con el nuevo asistent@. Se me olvidaba contaros el momento estelar de la jornada; este martes se le cayó la blackberry último modelo, al cubo del agua con el amoniaco. Cuando llegué y vi a su pijotero teléfono entre arroz para secarlo, me daba mal, pensé que me infartaba. A las mujeres se nos caen los móviles en la taza del water y a los caballeros además de caérselos en el coche……
“No se lo tiré yo”; por ganas se lo hubiese tirado tantas veces….